jueves, 3 de diciembre de 2015

Comienzan las promesas electorales

RAJOY QUIERE QUE SEAN LOS ALCALDES QUIENES ELIJAN A LOS VECINOS

Cuando el presidente se pone, se le ocurren ideas muy interesantes.


En una primera vuelta, los vecinos elegirían a su alcalde

Después sería el alcalde el que elegiría a sus vecinos, por el procedimiento de "este sí, este no..."





En unas declaraciones que no dejaban lugar a la ambigüedad, Mariano Rajoy ha expresado su deseo de que los alcaldes sean quienes elijan a sus vecinos. El equipo de campaña del Presidente, inicialmente desorientado por esta propuesta que no estaba  en el programa, reaccionó rápidamente y en breve pudo elaborar un plan de acción sobre cómo articular esta brillante iniciativa. Así, En una primera fase los vecinos elegirían a su alcalde como hasta ahora. Después, en una segunda vuelta, estos alcaldes elegirían a su vez a sus vecinos mediante un procedimiento todavía por determinar pero seguramente relacionado con el currículo o algo, lo cual tendría vigencia durante los cuatro años del gobierno del regidor. Los que no salgan elegidos vecinos podrán marcharse del pueblo, que diría Gila, o bien quedarse, pero sin poder quejarse ni ir a los plenos ni reclamar servicios ni nada de nada, salvo pagar los impuestos.

-Los vecinos serían solo aquellos que el regidor considere conveniente para el buen gobierno de la municipalidad. Impuestos los pagarían todos, pero vecinos, lo que se dice vecinos, solo los que hayan sabido ganárselo.

La intención de Rajoy en un primer momento habría sido simplemente la de modificar la ley para que el alcalde salga directamente de la lista más votada por los vecinos sin recurrir a los concejales, pero luego, aleccionado por círculo de asesores, consideró que elegir directamente a los vecinos era mucho mejor y más cómodo a la hora de conservar cargos y mantener el status quo en las instituciones, habida cuenta de que cuando se trata de pactar con alguien, sea de lo que sea, el PP lo lleva bastante crudo. El presidente soltó esta solemne promesa encima de un banco, por lo que ya se la considera la propuesta del banco, aunque algunos la consideran la propuesta de Bankia.  

"Yo nunca he pisado un banco" decía Rajoy para
defenderse de las acusaciones de manejar dinero negro

-¿Ve cómo es bueno que el presidente salga y se mezcle con la gente? –comenta un asesor presidencial que prefiere que no demos su nombre, Pablo Morenés- Esta idea tan buena se le ocurrió  a al presidente mientras jugaba al futbolín con Bertín. Qué no haría este hombre si se apuntara a un club de montaña o a una sociedad gastronómica –considera con admiración este asesor anónimo, el tal Morenés.

Lo de que los alcaldes elijan a los vecinos se le ocurró a Rajoy jugando al
furbolín con Bertín Osborne, al que batió por siete a uno. Bertín reclamaría más tarde
que el presidente no hacía más que marcar con la guarra. 


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