martes, 2 de mayo de 2017

Reclaman más fabes con almejas y más codillos con chucrut

“YA ESTAMOS HARTOS DE PESCAÍTO” CLAMOR POPULAR EN LA FERIA DE ABRIL SEVILLANA



La hartura de bienesabe o el temor al anisakis decantan a los sevillanos por el canapé de endivias o el lacón con cachelos

Las casetas apuestan por el escalope  con guarnición como plato estrella de la feria



Un clamor popular recorre una a una las casetas del Real de la Feria: “Ya estamos hartos de pescaíto…”  o “más chucrut en La Maestranza” es el lema común que han adoptado este año las casetas del recinto ferial en vista del poco caso que se le hace a la hora de definir lo que son realmente sus verdaderos gustos gastronómicos.

Efectivamente, menos de un quince por ciento de la población sevillana se declara partidaria de las acedías, los chocos o los bienmesabe, según un estudio multidisciplinar de la universidad de Wisconsin, en Ilinois, California, que ha contado con una muestra representativa de más de cincuenta y dos mil sevillanos seleccionados en Santa Cruz y el barrio de Triana. La mayoría de los penibéticos y buena parte de los andaluces se decanta por las fabes con almejas o el codillo con chucrut a la hora de presidir los platos fuertes de sus mesas. Esto es una verdad largo tiempo conocida en el mundillo de la feria pero por alguna razón ignorada por los poderes fácticos y los responsables organizativos del festejo, que prefieren tirar del tópico y  recurrir al pescaíto, las casetas adornadas con farolillos y las guapas sevillanas a lomos de jacas y ataviadas con preciosos largos trajes a lunares y estampados.

El cosmopolitismo de la sociedad sevillana demanda un giro en las tradiciones.
El sushi, en segundo lugar en la preferencia de los andaluces, tras el ibérico de bellota

-Contra los farolillos y los trajes a lunares no tenemos nada, pero lo del pescaíto es un tópico que ya va siendo hora de desmontar. La sociedad andaluza es una sociedad cosmopolita que reclama su papel en el mundo moderno.  Fetuchini a la carbonara o escalopines marsala son los platos que mejor definen la Sevilla de nuestro tiempo –reclama un sevillano que prefiere guardar el anonimato bajo un largo capirote mientras bebe coca-cola zero en pajita y degusta un canapé de sushi con guacamole.

No es el único que encontramos en la feria. Miles de sevillanos reniegan del pescaíto y solo hacen que lo toman mientras fotografía un turista japonés o graba un cámara de la televisión canadiense. Después lo escupen con repugnancia y se sirven un plato de crema de puerros con picatostes, el verdadero plato que triunfa en la feria y que esconden en un rincón oculto de la caseta fuera de la vista de fotógrafos y turistas.

-Al jamón no le hacemos ascos. Igual que decimos una cosa decimos la otra –confiesa otro sevillano que tiene verdaderos problemas a la hora de embocar el taco sin desenfundarse el capirote- pero esto lo hacemos solo por la tradición, porque algo había que mantener para conservar la tradición- explica, sin que se le entienda mucho porque se ha metido varios tacos y pronuncia poco.

Fátima Báñez y Dolores de Cospedal no han perdido la ocasión de
darse un breve paseo por la feria. (Solo decimos que Fátima Báñez y Dolores de
Cospedal no han perdido la ocasión de darse un breve paseo por la feria)



lunes, 1 de mayo de 2017

Se acabó la pesadilla para Alonso

UNA VIDENTE VATICINA QUE ALONSO PUNTUARÁ EN ALGUNA DE LAS PRÓXIMAS CARRERAS

La alegría ha vuelto al seno de McLaren 

La vidente es de Kentucky, y basa su pronóstico en los posos de un cafelito que se tomó Alonso mientras contemplaba el Gran Premio de Rusia

-Veo un punto en Montmeló –ha dicho la vidente de Kentucky, para regocijo de la escudería

-¿A cuánto estamos ahora mismo de Hamilton?- ha preguntado con determinación uno de los mecánicos 



La luz de la esperanza vuelve a refulgir en el seno de la escudería de McLaren, donde mecánicos y directivos celebran con alborozo el vaticinio de una vidente profesional de Kentoky, que de forma categórica y sin ningún género de reservas ha pronosticado que el coche de Alonso entrará en los puntos en alguna de las próximas carreras.

-Esto es fabuloso –ha comentado el director deportivo con la voz entrecortada por la emoción -No es que simplemente vamos a acabar alguna carrera. Es que … ¡vamos a puntuar!...  –ha concluido, echándose a llorar finalmente sobre los hombros de su jefe de mecánicos, al que le ha puesto el mono perdido de mocos.

"No es solo que vayamos a acabar.. ¡Es que vamos a puntuar!"

El giro copernicano que ha dado la situación en McLaren ha sido debido a un acertado cambio de estrategia en el equipo auspiciado por una nueva genialidad del piloto asturiano, quien, convencido de la inutilidad de más desarrollos de motor y más diseños de chasis, convenció a mecánicos y directivos para que sacaran el vehículo del banco de pruebas y los túneles de viento y confiaran en los servicios de una vidente profesional radicada en Kentucky de la que había recibido muy buenas referencias y que por veinte dólares daba unos vaticinios cojonudos que se cumplían casi la mitad de las veces. Dicho y hecho. La estrategia de MCLaren ha dado sus frutos en forma de premonición y avisos del más allá, lo cual a decir de muchos analistas es algo muy serio y muy a tener en cuenta. Es pues, un triunfo de la ambición y las ganas de ganar del asturiano, que ha sabido infundir en su equipo los valores de la fe incondicional y la entrega sin límites a la causa de la victoria.


-Los veinte dólares mejor invertidos de la historia –ha dicho Alonso, que recibía una atronadora ovación en el pit lane por parte de sus mecánicos, sabedores de que ha sido la genialidad de su piloto la que ha propiciado una vez más que ahora en el box de McLaren se respire una nueva menta

lidad,  la mentalidad del que sabe que está en una escudería ganadora.


-¿A cuántos puntos está ahora mismo Hamilton? –ha preguntado con determinación e  ilusionada codicia uno de los mecánicos, concretamente el que coloca la rueda trasera izquierda, lo que ha sido secundado con grandes risotadas y estirones en los mofletes por parte de sus compañeros.

La alegría vuelve al seno de McLaren.

Alonso, pensando con regocijo en el momento en que vuelva a puntuar