miércoles, 12 de diciembre de 2018

Gracias a la colaboración ciudadana

LOCALIZADO EL AUTOR DEL ANUNCIO DE LA LOTERÍA


En el momento de su detención portaba un décimo que acababa en siete
Circulaba con pasaporte falso y se había dejado crecer la barba

En el momento de su detención intentaba intercambiar lotería con unos parroquianos de La Pobla del Segur

Ciudadanos exige la inmediata convocatoria de elecciones 



Efectivos de la guardia civil de montaña de Jaca en colaboración con los mossos de escuadra de la Generalidad han localizado al autor del anuncio de la lotería de este año, que se había refugiado en una cabaña a las afueras de La Pobla del Segur y se hacía pasar por un jubilado venezolano.

Los mossos de escuadra no han querido detenerle alegando órdenes políticas de la Generalidad, pero un cabo de la guardia Civil se ha descolgado desde un helicóptero hasta el techo de la cabaña y desde allí le ha dicho que o salía él o que entraba el cabo, lo que el autor de la lotería ha entendido como un ultimatum y ha salido por su propio pie, aunque luego ha vuelto a entrar porque hacía rasca. Asimismo el cabo no tenía porqué haber bajado en helicóptero puesto que había una carretera muy buena para llegar a la cabaña,como bien le han indicado sus compañeros luego.

El autor del anuncio de la lotería vestía con ropas de ermitaño y se hacía llamar Hermenegildo. Asimismo decía que procedía de Venezuela y hablaba con un fuerte acento de teleserie que sin embargo nadie se creería porque sonaba más bien a argentino, viste. No obstante no hacía ninguna falta la coartada porque nunca bajaba por el pueblo salvo para comprar el Marca y las pocas veces que lo hacía nadie se fijaba en él.

El anuncio ha hecho mucho daño a muchas familias,
 especialmente entre ancianos y diabéticos. 

Una llamada a la policía alertando que había un tipo en un bar que no hacía más que dar la brasa a un matrimonio de ancianos para intercambiar lotería y hacerles llorar a base de historias entrañables sobre la Navidad, puso en alerta a las fuerzas policiales, que sin embargo pasó el asunto a los mossos porque todavía no estaba aplicado el 155. Los mossos alegaron falta de voluntad política para su arresto y llamaron entonces al cabo de la guardia civil en cuestión, que al cierre de la edición seguía colgado de una chimenea intentando zafarse de los arneses y descolgarse para volver a llamar al autor de la lotería y conminarle a que, o salia él o entraba el cabo.

Ya, sí, pero ¿y si toca ahí...?

No hay comentarios:

Publicar un comentario