Conmoción en la cabalgata

MELCHOR ABDICA EN SU HIJO MELCHORCITO

Los Reyes Magos, a su llegada al Santiago Bernabeu, donde hicieron 
el saque de honor. Melchor, a la derecha  (arriba) momentos antes de decir 
que esperarse todos que tenía que anunciar una cosa 

Es un tipo muy preparado, con varios másteres en manejo de equinos y lanzamiento de golosinas

Reinará con el nombre de Melchorcito Primero

Lo primero que hace el  nuevo monarca es pedir una escopeta

En mitad de la cabalgata, el rey Melchor dejó de tirar caramelos a la chiquillería y se bajó del camello para anunciar que abdicaba irrevocablemente en favor de su hijo Melchorcito. El movimiento del monarca dejó estupefacta a la comitiva, que veían venir la renuncia pero nunca pensaron que la fuera a hacer efectiva allí mismo, en mitad del Paseo de la Castellana esquina con Prim. Fuentes cercanas al monarca han confirmado que Melchor venía sopesando desde tiempo atrás la idea de abdicar porque  ya estaba cansado de tanta cabalgata y tanto trajín, justo el día en que más nieve hay en Baqueira, pero que sobre todo le hizo mucho daño aquella foto en la que se le veía abatiendo un dromedario durante la cabalgata anterior. Otras fuentes apuntan sin embargo a que su idilio con un paje de la comitiva real ha podido pesar bastante en su decisión de mandar a tomar por culo la cabalgata, en la que venía desfilando desde hace dos mil y pico de años.

-Estaba cansado de tanta cabalgata y tanto niño, la verdad. Usted no sabe lo que agota el traqueteo de un camello- afirmó el ya ex rey Melchor. –Te deja los riñones fosfatina.

Los Reyes Magos, en los calabozos de Plaza Castilla,  detenidos por un malentendido 
relacionado al parecer con los camellos. Baltasar tampoco tenía los papeles en regla.

El nuevo rey Melchorcito,  que subirá al trono con el título de Melchorcito Primero, ha sido proclamado allí mismo,  a los pies de la carroza de Coca-Cola, y en su mensaje inaugural ha dicho a todos los niños que le llena de orgullo y satisfacción, todo en general le llena de orgullo y satisfacción, ha dicho, al tiempo que ha pedido la escopeta de su padre, que ha visto un dromedario muy hermoso al final de la fila. Fuentes conocedoras del entorno real afirman que el nuevo Rey es un tipo muy majo y preparado, que ya puede serlo porque el andoba tiene sus buenos mil seiscientos años. Al parecer Melchorcito habla perfectamente el arameo y tiene varios másteres en conducción equina y lanzamiento de golosinas. Recordemos que hace unos años el anterior rey le sacó un ojo un niño con un turrón de guirlache.

Los Reyes Magos, con Cornina, la paja que al parecer ha precipitado la abdicación de Melchor

Preguntadas sus otras majestades Gaspar y Baltasar acerca de la abdicación de su compañero Melchor y si ellos piensan  seguir el mismo camino, Gaspar ha respondido que no, que mientras haya niños en el mundo y solo tenga que trabajar una noche al año, él piensa seguir encima del camello el tiempo que haga falta mientras el cuerpo aguante. Baltasar por su parte ha sido más taciturno y ha confesado que ahora no puede dejar el cargo porque le queda muy poco de desempleo y con eso no puede mantener a la familia, que la tiene toda en Oriente, no en el Palacio sino en otro sitio muy jodido y cutre junto al Eúfrates, lleno de moscas. Al parecer Baltasar anda un poco receloso con toda esta cuestión dinástica porque se da la circunstancia de que Melchorcito es negro, como él, lo que ha dado lugar siempre a un sinfín de comentarios y ha provocado desde tiempo atrás un cierto distanciamiento entre ambos monarcas. Por eso Gaspar va siempre en medio, para evitar que se enganchen.

Los cuatro reyes, antes del cochinillo en Casa Botín.
Melchorcito es el de la derecha. Uno de los dos.