martes, 24 de febrero de 2015

MONEDERO, UN PRODUCTO DE LA FACTORÍA ARRIOLA





Es un cyborg de la serie HAL 7000


Están diseñados para aupar formaciones o cargárselas, según convenga a los intereses del partido


Albert Rivera y Rita Barberá, otros cyborgs silentes a la espera de instrucciones de Arriola






El equipo de investigación de La Razón Today ha logrado infiltrarse en la factoría de modelado de la opinión de Pedro Arriola y ha puesto al descubierto uno de los secretos mejor guardados de la formación que preside Rajoy: una serie de cyborgs especialmente diseñados para introducirse en organizaciones incipientes y partidos de nuevo cuño, dotados de una altísima cualificación en posicionamiento preelectoral y normativa estatutaria, con el objetivo de ganarse la confianza de las bases y ascender a las más altas responsabilidades de la cúpula. Luego, una vez instalados en lo más alto de las ejecutivas, desplegarían allí la misión que Arriola les tendría encomendada, bien aportando su saber y su dialéctica para ganar cuotas de electorado a costa de un partido rival, o bien, si el propio partido empieza a constituir una amenaza como es el caso de Podemos, desactivarlo a tiempo mediante un circuito de autodestrucción programada que expone al ciborg a los envites de un sonado escándalo de corrupción o un flagrante episodio de financiación irregular. 

La fuente anónima -a la que llamaremos por razones de seguridad "El señor que se tira cuescos"- que nutre de información a los reporteros La Razón Today citándolos periódicamente en un oscuro garaje,   ha manifestado que mediante estos artilugios de ingeniería electoral, Arriola ha logrado infiltrar en las cúpulas de todas las jóvenes formaciones  uno o varios cyborgs con la misión de aupar la formación o arrostrarla al fracaso, según convenga a los intereses de Génova. Es así, por ejemplo, cómo se explica que Monedero no haya presentado aún los documentos que dieron lugar a su célebre contrato de cuatrocientos mil euros, no porque no lo tenga o no quiera mostrarlos, sino porque el señor Monedero no había sido todavía fabricado en aquella época. El supuesto contrato es producto de la maquinaria de autodestrucción.

La misión de los cyborgs silentes es la de ganarse la confianza de las bases y hacerse los imprescindibles en las respectivas formaciones, de manera que su su propia imagen sea la imagen del partido. Luego, a su debido tiempo, el cyborg caerá en el descrédito a una señal o mensaje de Arriola, de manera que la ignominia caiga sobre el partido otrora ilusionante y el descrédito del cyborg sea el descrédito de la formación misma.

Pero no todo está perdido. A los ciborgs de Arriola se les detecta por ciertas particularidades que les llevan a hacer cosas extravagantes y adoptar posturas distintas a las de políticos naturales, afirma "El señor que se tira cuescos".  Algunos se desnudan en público, como es el caso de Albert Rivera, que salió en pelotas en una campaña de imagen. Otros, como el mismo Monedero, tocan palmas y se arrancan por bulerías durante los mítines. Un ciborg silente del propio partido popular es la alcaldesa de Valencia Rita Barberá, a la que un cortocircuito en los sistemas de refrigeración ha provocado que recientemente se encasquillara en el concepto "Caloret" y colmara de extravagancias su pregón de fallas. Celia Villalobos es asimismo un cyborg fallido que el señor Arriola decidió quedarse para sí mismo con el compromiso de repararlo para que sirviera al partido mediante mecanismos todavía no bien dilucidados. Todos estos son síntomas que permitirían detectar a los ciborgs de Arriola y desenmascararlos antes de que puedan hacer más daño a formaciones rivales, explica "el señor que se tira cuescos".  De otro modo, de no desarticularlos a tiempo, las elecciones ya estatían prácticamente decantadas.

"El señor que se tira cuescos" afirma que  Albert Rivera, de Ciudadanos, es otro
Cyborg a las órdenes del partido popular, que la cagará a su debido tiempo en el momento de
que llegue a constituir una seria amenaza a la formación neoliberal.

-¿Y en el partido socialista? -preguntamos con expectación -¿Hay algún cyborg entre las filas de Sánchez?

-De momento no hace ninguna falta- precisa "el señor que se tira cuescos" esbozando una media sonrisita-  Sus guirigays internos permiten dedicarle toda nuestra atención a los partidos incipientes, a las jóvenes promesas que encandilan a las masas desilusionadas y que un día puedan constituir un serio obstáculo a nuestras expectativas de repetir legislatura.

-¿Y en Izquierda Unida? -preguntamos, sin demasiada convicción. En este caso "El señor que se tira cuescos" no tuvo ningún pudor en carcajearse abiertamente.

-Son un lujo impagable. Nos ahorran mucho presupuesto.

La cúpula de Podemos ha intentado a la desesperada contratarlos servicios de Harrison Ford para que, emulando lo que hacía en Blade Runner, desenmascare al resto de ciborgs que sospecha mantiene aún Arriola infiltrados en su formación, aunque el señor Ford ha contestado que no va a venir a eso porque no le da la gana ("does not give me the fucking win, hostia"). En su defecto piensan vigilarse de cerca unos a otros y estar al loro de todo aquél que se ponga a cantar o hacer algo inopinado durante los mítines o tertulias, para echarle a patadas sin más preámbulos a las primeras de cambio.
 


Miembros de la ejecutiva de Podemos escuchando a Pablo Iglesias durante un recital de poesía de exaltacion de la
gesta bolivariana. La formación sospecha que uno o varios de estos miembros son cyborgs al servicio de Arriola.

4 comentarios:

  1. No es mala teoría. Ahora aguantar tantos años al cyborg Villaobos en tu propia casa dándote la badila día y noche es muy fuerte...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pero la pone a jugar con el Ipod para que se distraiga y no enrede...

      Eliminar
  2. ¿Y qué hay de los votantes cyborg? ¡Estos sí que son multitud!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pero en ellos se gastan poco. Los reciclan de ordenadores viejos que sacan de los contenedores...

      Eliminar